Muchos propietarios temen oír que la Inspección Técnica de Edificios (ITE) ha salido desfavorable. Sin embargo, se trata de una inspección esencial que permitirá que se mantenga y mejore la seguridad en los edificios. Se trata de un trámite obligatorio, y en caso de ser negativo, se deberá proceder a realizar las obras pertinentes para subsanar las deficiencias que han sido determinadas por el profesional a cargo.
La Inspección Técnica de Edificios es una inspección en la que se comprueba que las condiciones de seguridad, estabilidad y consolidación de los edificios sea la adecuada. Por lo general, se trata de una revisión visual de los elementos externos e internos del edificio, tales como la estructura y cimentación, las fachadas, las cubiertas y azoteas, las redes generales de fontanería y saneamiento, y elementos de accesibilidad.
En definitiva, se trata de mantener la seguridad y el control de los edificios ante deficiencias en los elementos anteriormente citados. Por este motivo, la ITE es la forma de acreditar que los edificios se encuentran bajo la normativa y son perfectamente habitables.
En Madrid, por ejemplo, es obligatorio a partir de 2019 para los edificios anteriores a 1963, pero la normativa es distinta dependiendo de la Comunidad Autónoma. Para obtener más información de la ITE en tu Comunidad Autónoma, puedes consultarlo aquí.
Una vez se haya realizado el informe por el que se determine las incidencias en la inspección de una ITE desfavorable, se podrán dar dos casos: en primer lugar que no haya que realizar obras estructurales (no debe realizarse proyecto técnico) o que se necesiten llevar a cabo un proyecto técnico. En cualquier caso, habiendo deficiencias, e necesitará la realización de las obras requeridas para mantener el edificio bajo la normativa, en el tiempo que el técnico que haya realizado la propia inspección determine para ello. Posteriormente, serán los servicios municipales quienes deban dar la orden de ejecución para que se mantenga la seguridad constructiva.
En el caso de necesitar proyecto técnico, deberá indicarse en el informe de la ITE. Este proyecto técnico podrá ser redactado por el propio técnico competente y se procederá a la ejecución. Se pedirá a un arquitecto que resuelva las deficiencias técnicas y arregle los desperfectos que pudieran haberse encontrado. En función del estado del inmueble, la cantidad de esta obra varía.
Posteriormente, una vez se hayan llevado a cabo las subsanaciones pertinentes, se deberá pasar de nuevo la ITE para comprobar que se han arreglado los desperfectos. Si no se cumple esta obra en el plazo pertinente, los propietarios se arriesgan a una multa. Y lo que es peor, aumenta el riesgo en el edificio.
Al igual que las inspecciones varían dependiendo de la Comunidad Autónoma, ocurre lo mismo con los permisos y los plazos, por lo que lo mejor es que se consulte con un profesional o en las páginas oficiales.
Con los datos extraídos de nuestros informes hemos determinado que las deficiencias técnicas más comunes en una ITE desfavorable son:
Si recibes una ITE desfavorable y necesitas presupuesto, no dudes en consultar nuestros servicios.
Fuentes
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